3 de febrero de 2023
La violencia entre jóvenes magdalenenses se amplía en las redes sociales
Los jóvenes argentinos se enfrentan a una creciente ola de violencia en las calles y en las redes sociales. En los últimos años, los informes de peleas y agresiones entre jóvenes han aumentado significativamente, y las redes sociales han sido señaladas como un factor clave en este aumento.
Las redes sociales son un espacio en el que los jóvenes pueden comunicarse y compartir información de manera rápida y efectiva, pero también pueden ser un lugar donde se propagan rumores y se incita a la violencia. Muchos jóvenes utilizan las redes para insultar y amenazar a otros e incluso han organizado peleas y actos de violencia en línea.
Este es el reflejo de lo que se pudo observar con los videos de peleas de jóvenes de Magdalena en diferentes espacios públicos de la ciudad. Donde testigos que se contactaron con DATA, exponen que dichas peleas eras programas por una cuenta de instagram denominada @escrachos_y_confesiones.
Dicha cuenta sirve para publicar los videos de la pelea. Para luego reírse y burlarse de aquel que fue derrotado/da. También, según los testigos, sirve para realizar bullying por su condición física o socioeconómica.
Video de una de las peleas (SUSCRIBITE A NUESTRO CANAL)
La falta de supervisión y la naturaleza anónima de las redes sociales pueden ser perjudiciales para la salud mental y emocional de los jóvenes. Los expertos advierten que la exposición constante a la violencia en línea puede tener un impacto negativo en la autoestima y la salud emocional.
Es importante que los jóvenes comprendan lo vital de respetar a los demás y de evitar la violencia, tanto en las calles como en las redes sociales.
La violencia contra niños y adolescentes es un problema grave en Argentina y en todo el mundo. Según cifras del Observatorio Nacional sobre Violencia Institucional, en Argentina, en 2019, se registraron más de 7.000 denuncias de abuso sexual contra menores de edad. Además, la violencia doméstica y familiar también afecta a los niños y adolescentes, y se estima que el 25% de los casos de violencia doméstica en el país involucran a menores de edad como víctimas o testigos.
Es importante destacar que la violencia infantil y adolescente puede tener graves consecuencias a largo plazo en el desarrollo emocional, psicológico y social de las víctimas. Por lo tanto, es necesario tomar medidas efectivas para prevenir y abordar esta problemática, a través de políticas y programas de protección y apoyo a las víctimas, así como de la sensibilización y concientización de la sociedad sobre su importancia y gravedad.