10 de octubre de 2025
🧠 Día Mundial de la Salud Mental: todos podemos estar mejor

💬 Cada 10 de octubre, la Organización Mundial de la Salud (OMS) impulsa el Día Mundial de la Salud Mental, una fecha clave para visibilizar los desafíos psicológicos que enfrenta la población global y derribar los estigmas que aún rodean a los trastornos mentales. Este año, el lema elegido es claro y urgente: “Es hora de priorizar la salud mental en el lugar de trabajo”.
🌍 Según la OMS, el 60% de la población mundial trabaja, por lo que los entornos laborales tienen un papel decisivo en el bienestar emocional. En su comunicado, el organismo advierte que “las condiciones poco saludables, la estigmatización, la discriminación y la exposición a riesgos como el acoso son factores que deterioran la salud mental”. En contrapartida, los espacios laborales seguros y empáticos pueden protegerla y fortalecerla.
📉 Los problemas de salud mental repercuten directamente en los lugares de trabajo: aumentan el ausentismo, reducen la productividad y elevan los costos sanitarios. La evidencia científica muestra que el malestar emocional —ansiedad, depresión o estrés— crece año a año: del 18,4% en 2010 al 26,7% en 2023, alcanzando a una de cada cuatro personas.
😔 Este aumento refleja no solo patologías, sino también un déficit estructural de bienestar emocional y apoyo social. El mismo estudio indica que los sectores más vulnerables duplican o triplican los niveles de malestar respecto de quienes cuentan con mejores condiciones socioeconómicas.
🎭 La llegada del último trimestre del año suele profundizar esta tensión emocional. Entre el cierre de ciclos, las presiones laborales y las expectativas sociales, el estrés y la ansiedad tienden a intensificarse, afectando tanto el cuerpo como la mente. La búsqueda de la perfección, la comparación constante y la autoexigencia excesiva son factores que alimentan este desequilibrio.
👩⚕️ Para comprender mejor este fenómeno, conversamos con Juliana Rebelles, licenciada en Psicología (UADER), integrante del equipo de Salud Mental del Hospital J.M. Cullen y docente universitaria. Ella señala que “la salud mental debe entenderse como un problema sanitario actual y prioritario”.
🗣️ “Si bien venimos hablando de salud mental desde hace tiempo, en los últimos años las problemáticas se han agudizado: las tasas de suicidio y de consumo problemático son cada vez más altas y los casos más complejos”, explicó Rebelles.
🔍 La especialista subraya que la salud mental no es sinónimo de bienestar absoluto, sino “un proceso complejo donde intervienen múltiples factores: psicológicos, biológicos, sociales, económicos, políticos y sanitarios”. Según afirma, “no podemos pensarnos como individuos aislados; somos seres sociales atravesados por lo que ocurre a nuestro alrededor”.
❤️ Cuando se le consultó qué puede hacerse para cuidar la salud mental, Rebelles fue clara:
“No hablo de consejos, sino de recomendaciones. Lo esencial es contar con ‘otros de cuidado’: vínculos afectivos, familiares o amistosos que sean sostén. Y, cuando sea necesario, buscar un espacio terapéutico para trabajar los malestares antes de que se agudicen”.
📱 Además, advirtió sobre uno de los males contemporáneos más extendidos: la hiperestimulación.
“Vivimos sobreinformados, recibiendo estímulos todo el tiempo. Por eso es fundamental encontrar momentos de pausa, refugio y desconexión. La ansiedad, la depresión y los consumos problemáticos están muy ligados a este modo de vida acelerado”, señaló.
💭 Para Rebelles, el espacio terapéutico cumple un rol central:
“En el análisis, se trata de suspender esa avalancha de estímulos y permitir que cada persona encuentre sus propias preguntas, sus propios caminos. Es un lugar muy potente para reencontrarse con uno mismo”.
📚 Finalmente, citó al padre del psicoanálisis, Sigmund Freud, quien sostenía que “la salud mental consiste en poder amar y trabajar”. Y reflexionó:
“Hoy, tanto el trabajo como los vínculos amorosos están atravesados por la lógica individualista y la precarización. Volver a pensar lo amoroso y lo laboral puede ser una buena pista para construir un horizonte más vivible”.
✨ En definitiva, cuidar la salud mental no es un lujo, es una necesidad colectiva. Crear espacios empáticos, promover vínculos saludables y frenar el ritmo vertiginoso de la vida moderna son pasos urgentes para poder, entre todos, estar un poco mejor.